domingo, 13 de julio de 2008

De arquitectos, albañiles y desideratas varias

Putos azulejos...Esta tarde he estado hablando con un muy buen amigo y ex-compañero, que, como es de recibo entre los Ingenieros Informáticos de profesión, es inquieto, curioso, y, por qué no decirlo si lo hago desde el respeto y la admiración, un poco friki. El típico colega con el que puedes hablar de Feynman lo mismo que de Homer Simpson. Fue él el que me lanzó a esto de la comunidad blogger por el siempre insalubre método de dar envidia. No tuvo más que mostrarme su blog (www.naufragandoporlared.com), que recomiendo vivamente, para sentirme en la obligación de meterme en el terreno fangoso y desconocido que es este de los blogs.

El caso es que estando discutiendo sobre lo divino y lo humano, ha venido a preguntarme por qué estoy tan jodido como se supone que estoy, aunque más que como estoy debería decir como me veo. Para describirle la situación en la que me encuentro, pese a estar hablando con un profesional de mi mismo gremio, he tirado de la parábola del arquitecto (Il Venturetto, capítulo II, versículos 1-43):

Cuenta la Historia que había un arquitecto que se dedicaba a hacer oficinas. Quizás no era el mejor, pero hacía oficinas dignamente, gustaba de hacerlas, y con ello pasaba los días. Llegó un día en que, como era el que más sabía de las oficinas que él mismo había hecho, pasó a encargarse de cambiar la decoración de las salas de juntas, a revisar la instalación de los ascensores y, en el mejor de los casos, a añadir más oficinas iguales a las que ya había en el solar de al lado. Aquello no era hacer oficinas, aquello era hacer más de lo mismo, y uno no se hace arquitecto porque le gusten los ladrillos, sino porque le gusta imaginar cómo transformar un terreno baldío en un sitio donde vivir.

Vino a dar la casualidad de que en aquella época convulsa le ofrecieron hacer chalets.

— ¿Chalets? Yo no sé hacer chalets —dijo el arquitecto.
— No importa. Si eres arquitecto es cuestión de ponerse.
— Sí, eso es verdad, pero los chalets tienen piscinas, y buhardillas, y barbacoas, y yo no sé hacer nada de eso.
— No importa. Cuando tengas que hacer piscinas, buhardillas y barbacoas ya aprenderás.

Y oyendo a los que le decían que se fuera a hacer chalets, y desoyendo a los que le dijeron que no lo hiciera, este arquitecto dejó su trabajo de hacer oficinas, y pasó al maravilloso mundo de los chalets. No le parecía tan mal aprender a hacer piscinas, buhardillas y barbacoas. No lo hizo convencido de estar haciendo lo correcto, pero sí estaba convencido de que estaba haciendo lo que debía.

Así que llegó el primer día, esperando ver planos de chalets de los que aprender en noble oficio de la construcción de casas de recreo. Esperaba ver planos de chalets de 3 plantas con piscinas, buhardillas y barbacoas, pero allí no había nada de eso. Lo único que había eran fotos de chamizos toscamente construidos, pero con carteles luminos como los que ponen en los clubs de carretera, donde decía, ora en azul ora en rojo, "Chalé de lujo".

Tras meses de ignorancia de este nuestro ya querido arquitecto se apercibió de su verdadera labor: alicatar los baños de los chamizos. Ni siquiera se trataba de remozar los baños. Debía cambiar los azulejos alrededor del váter, pero sin moverlo de sitio y sin que dejara de estar "al uso". Había dejado las oficinas porque estaba cansado de hacer siempre lo mismo y había pasado a poner baldosines con la cabeza metida en un retrete.

De nada sirve pensar en volver al maravilloso mundo de las oficinas. Si he acabado con la cabeza metida en un retrete, ¿quién me dice que no me ofrezcan algo como "desarrollo de sistemas de higiene y salubridad" y no vaya a acabar cavando letrinas?

Para colmo de males la memoria, esa enemiga mortal de mi descanso que se obstina en traerme a la mente la desiderata que me deja sin dormir, sin soñar y sin vivir, me empuja al derrotismo, al abatimiento y a las dudas existenciales.

Así es fácil caer entonces en la languidez de siempre, tan difícil de disimular. En este punto se percibe en los demás una mezcla entre conmiseración y escepticismo que a uno le sumen aún más en el desánimo.

Es entonces cuando la desazón emocional que se produce al ver la circunstancia en la que se encuentra uno mismo por sus errores le sumen en un desequilibrio espiritual que se somatiza luego con un malestar tan incómodo como evidente.

Queridos niños: hace un tiempo me enfrenté a la búsqueda de la felicidad. Entonces concluí que si la felicidad no venía a buscarte lo mejor era salir a su encuentro. Es duro equivocarse a cada paso, pero es más duro no caminar, y más duro aún tener zapatos de hormigón... que se ha puesto uno mismo.

16 comentarios:

  1. Me satisface y me llena de orgullo sano, ver que me tiene en tan alta estima Sr. Il Venturetto, cosa que desde mi modestia cultivada con los años (y con las hostias de la vida) no creo que merezca.

    Y aunque me regocije en la lectura de la parábola de sus memorias( muy bien traida, todo sea dicho) he de decirle que el mejor párrafo de su perorata es, sin duda, el último.

    La felicidad es como un topillo: está por todas partes, pero no hay quien la atrape a la jodía. Así que no nos queda más remedio que atarnos las alforjas y salir a su encuentro dejandonos la piel en el camino, si hace falta. No lo olvide esto nunca.

    Y si para ello es necesario volver a hacer oficinas clónicas en un solar abandonado, sea. Mientras tanto, hablaremos de Homer, de Feynman, de Bender o de Einsten tantas veces como sea menester.

    Un saludo de su amigo friki.

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  2. Vaya, este era el post de dolor y sufrimiento. ¿No tocaba uno de ciencias? Joder, ya es que ando despistado.

    Los curros son para ganar pasta, si es posible mucha pasta, pero el pasarlo bien en ellos es secundario, para mi al menos. Mientras en el curro estés tranquilo, tengas tu horario y puedas tener tiempo para tus cosas... ¿pues que más quieres? Vamos, que otra opción es dedicarte a lo que realmente te gusta aunque vivas peor o no ganes tanta pasta, que siempre se puede volver a cambiar uno de curro.

    La felicidad existe, no es el conformismo de aceptar todo lo que venga, sino saber apreciar las cosas que uno tiene. Y tampoco me llore usted tanto, que sabe tocar la guitarra. Si me oyera a mi tratar de seguir las lecciones del libro si que sabría lo que es el infierno.

    Le recomiendo que dedique más tiempo a pasarlo bien haciendo cosas que dando vueltas a los mismos temas, porque si le damos vueltas a algo sin buscar solución nos comemos la cabeza y la cagamos. Si quiere pensar en algo, piense en algo entretenido... como la Monica Bellucci o la italiana de Ferrari (no se preocupe, le aseguro que no he deshonrado a su italiana).

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  3. @Dragomir: Me dijo usted unas muy sabias palabras cuando estaba en la disyuntiva de qué hacer con mi vida: "Vete a donde te lo vayas a pasar mejor". Evidentemente me equivoqué.
    La pasta es necesaria para mantener una familia, pagarle zapatos a una golfa o viajar y conocer el mundo, así que de sobra sabe que yo no necesito pasta (lo cual no quita para que me pague usted lo que me debe).
    Para hacer cosas hay que tener ánimo, y para tener ánimo hay que hacer cosas. Y no hablemos de italianas que luego tengo pesadillas.

    @Miguelón: Cuando ha hablado usted del topillo se me ha venido a la cabeza algo escatológico. Eso del topillo asomando el hocico siempre me trae a la mente cosas de mucha enjundia.
    Sr. D. Miguelón, es usted un amigo de los buenos, y una mejor persona.

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  4. Sobre ésto, todos tenemos experiencias varias.....yo dejé familia, amigos y demás buscando la felicidad divina en los madriles y despúes de 6 años sin encontrarla (aunque encontrando calmantes en formato amigos), resulta que ni las motos, ni el trabajo, ni las pivas ni las borracheras ni nada de eso me ha llenado tanto como lo de ser papi...sí es verdad que suena cursi y nada friki pero como las matemáticas, es felicidad exacta: 1 + 1 = 3..xDDD
    Ahora tendré que resolver la ecuación para que la solución no me dé negativo pero eso es otra historia.

    Por cierto, al curro se va a hacer amigos y compartir experiencias. Si vamos a pasar la mayoría de nuestra vida allí habrá que intentar disfrutar de ello.

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  5. Usted es una gran persona, lo que pasa es que bebió poco de joven y no mató suficientes neuronas.

    Señor Ventura, no se agobie y vuelva donde fue feliz (menos si cobra menos y su horario es una mierda). Hágame caso, no se coma tanto la cabeza, que la vida es tener una play3 y usted la tiene.

    Claro que le pagaré lo que le debo, que se ha creido? Si va a ser por pasta!!!

    Hazme caso, solo tienes dos opciones: relajarte y darte cuenta que tan mal no va todo o, poner tu piso a mi nombre y hacer el highway star.

    Pero por Dios, no se me hunda, vuelva a tocar la guitarra, salga a caminar o a conducir, sigue con el blogg... por Dios!! Pero si hace usted de todo y bien!!!

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  6. @de la Croix: No me cabe ninguna duda de que tener un hijo proporciona el máximo de felicidad posible. De hecho cuando mis amigos tienen (tenéis) niños a mí me alegra la vida, y sabes que lo digo en serio.
    El problema está en que, a día de hoy, para tener un hijo hace falta una mujer, y todos conocemos mis problemas para relacionarme con mujeres. A las mujeres no les gustan los pagafantas para procrear, y así es jodido tener un hijo.

    @Dragomir: Me reitero: El mundo no es lo suficientemente bueno para usted, pero usted hace que sea mejor. Gracias.

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  7. Amigo Ventura, de la pasta que voy a dejar en el tanga que cubre el escuálido culo de una meretriz oriental, prometo que 10000 yenes serán en su nombre. Luego le daré una palmada en el cachete y le diré "what would you do for money, honey?".

    No se preocupe, si al final todos nos morimos. Y usted al menos podrá decir que se terminó el primer nivel del sonic jugando con los pies.

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  8. ¿Sabe usted tocar la guitarra? Cojones! eso cambia muchísimo las cosas...
    La guitarra es un instrumento que amansa a las fieras, atrae a los topillos, y hechiza a las golfas.
    ¡Tiene usted la llave de la felicidad!

    .. A menos que estemos hablando de la guitarra formato chiquilicuatre que viene con el Guitar Hero... ¡dígame que no, por Dios!.

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  9. @Dragomir: Su viaje a Japón será épico. Será la primera vez que el gobierno japonés, tras las bombas de Hiroshima y Nagasaki, se rinda ante el demonio extranjero. Las prespiputas orientales cambiarán siglos de tradición ejerciendo como geishas y pasarán a restregar el culo por la cara a todos los turistas europeos nada más bajarse del avión.
    En un par de años todos los mangas tratarán sobre un pequeño occidental viril pero justo y ecuánime que visitó Japón acompañado por un escudero alto, desgarbado y con barriga.
    Os van a conocer como los nuevos don Quijote y Sancho Panza (esto literal).

    @Miguelón: Digamos que aunque no sé tocar la guitarra, tengo una buena colección de ellas. O al menos tengo 2 guitarras iguales de cada modelo, eso sí.
    Lo de aprender a tocar, con las golfas no sirve para nada. Lo que buscan es un tío malote que les cante baladas, y yo soy un tío calzonazos que toco (tocaba) ROCK.

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  10. El que diga que es feliz 24/7 es que realmente es gilipollas. La felicidad viene en pequeñas cápsulas y cuando viene hay que disfrutarla. Felicidad puede ser leer en Autosport mientras comes, por ejemplo, o estar con tu pareja en según que momentos o escuchar a Deep Purple en el iPod o en el coche, o mil cosas diferentes.
    Por cierto, ¿tienes alguna Fender Stratocaster blanca? Ya sabes por qué lo pregunto.

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  11. Pues no trabajo Fender aunque me gusten los Purple como al que más (no te incluyo), pero sí una marca que compraron no hace mucho.

    Tengo una como esta:
    http://www.gretschguitars.com/gear/index.php?product=G6131SMY&cat1=&cat2=&q=&st=1
    y otra como esta:
    http://www.gretschguitars.com/gear/index.php?product=G6131MY&cat1=&cat2=&q=&st=1,
    y además en esos mismos acabados (arce rizado la de una pastilla, natural la de dos).

    No toco nunca, pero cuando llego a mi casa y veo a mis Gretas es como si fueran mis hijas.

    Joder, qué mal padre soy. Está claro que les tengo que dedicar un post.

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  12. Joe, ventur.

    Eres único, nadie como tu me hunde en la mas lúgubre depresión....

    La solución a todos tus problemas es la siguiente: Vende la casa, amplia la hipoteca y cómprate un Ferrari. Tendrás todo lo que necesitas…..

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  13. ¿Que yo te hundo? ¡Pero si eres tú el que anda contando historias de coches italianos con motores de cuatro tiempos!

    Por cierto, si vendo la casa no sé cómo voy a poder ampliar luego la hipoteca aunque, desde luego, teniendo un Ferrari no necesitaría nada más. Bueno, quizás un seguro a todo riesgo, ya sabes...

    Un abrazo!

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  14. Bueno, bueno...
    Vuelvo de mis vacaciones por tierras de herejes protestantes, y me encuentro con lloriqueos.
    Y encima, lloriqueos laborales.

    Señor mio. Espabile, proponga, quéjese a su jefe, que por mucho antebrazo que tenga no es tan fiero.
    O al menos no debería importarle lo que pase. No esta acaso con la cabeza en el retrete??

    O, si eso no le apetece, busque otra cosa. Nadie le va a reprochar nada... y si se le reprocha le dará igual por que habrá mejorado.

    Pero estos lamentos de plañidera me molestan, máxime cuando algo de responsabilidad tengo en el asunto, por haberle animado.

    Así se lo digo, o mueve el culo, o se relaja y disfruta.

    Si no fuera por los post de F1, seria usted una drama-queen digna de las primeras posiciones en MySpace...

    Todo esto, desde el afecto, el cariño, y la indignación.

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  15. Lo de tener la cabeza metida en el retrete me trae a la cabeza una historia muy fresca:

    Había una vez una golondrina que empezó a emigrar demasiado tarde en invierno, y se estaba congelando mientras volaba. Al final cayo a tierra, y creyó que su vida se acababa. Pero entonces se le acercó una vaca que le soltó una plasta encima. La mierda estaba calentita, así que la golondrina se encontró mucho mejor y empezó a piar de satisfacción. En ese momento un gato oyó a la golondrina, la saco de la plasta, la limpió, y se la comió.
    Esta historia tiene tres moralejas :
    1) No todo el mundo que se te caga encima es tu enemigo.
    2) No todo el mundo que te saca de un montón de mierda es tu amigo.
    3) Si eres feliz y estas calentito dentro de tu montón de mierda, cállate.


    El caso es que uno puede estar cubierto de mierda por un tiempo limitado. Sí, es necesario estar caliente, pero cuando estás caliente con la boca llena de mierda la cosa no se disfruta tanto. Habrá quien diga que si estás cubierto de mierda además de estar caliente tienes algo que llevarte a la boca; pero, aunque necesito estar caliente como todo el mundo, no aguanto comer mierda por tiempo ilimitado.

    Soy un miedica empedernido y, sabiendo que siempre, SIEMPRE, se puede estar peor, podría decir que estoy genéticamente predispuesto para resistirme al cambio. Recordará lo que me costó el último, así que imagínese lo que me costaría otro en tan breve lapso de tiempo.

    Necesitaba un cambio, sí, y lo sigo necesitando. El caso es que cambié, pero no lo que necesitaba. Eso lo sé ahora.

    Sigo sin saber qué cambio necesito. Es posible incluso que lo sepa y no sea consciente o no lo quiera saber, porque aunque lo supiera creo que no tendría arrestos suficientes para intentarlo.

    Y sepa que su responsabilidad en mi desazón actual es nula. Usted estuvo y ha estado a mi lado siempre que he estado jodido y así lo tomo y agradezco. La decisión fue mía y si me equivoqué está claro que me equivoqué por mí mismo, no por los que me aconsejaron o animaron a que tomara la decisión. Aunque me equivoqué en el cambio, cambié porque era lo que necesitaba. Lo malo no fue cambiar, sino el cambio en sí.

    Y mi culo nunca ha estado relajado, como bien lo sabe usted, que me ha aguantado sandeces a porrillo desde tiempos inmemoriales.

    Por suerte tenemos el Call Of Duty 4...

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  16. hola mi niño:
    Me da mucha pena verte asi y a la vez me cabrea. No eres ningun niño y tienes en la vida experiencias suficientes para saber que el que no llora no mama.
    Ver la miseria de los demas no te hace sentir mejor pero deberia hacerte pensar que la felicidad plena no existe.
    En mi opinion, y sabes que te lo digo porque te quiero, tu problema es que buscas un curro que te llene en todos los aspectos y que cubra todas tus necesidades, de amistad, de diversion, etc.... y lo que debes hacer, cabezon mio, es tener mas vida fuera del curro. Y aunque estes destrozado y creas que las cosas no pueden ir peor, salgas a la calle con aqellas personas que te aprecian de verdad y empieces a disfrutar de la vida. Porque gracias a dios el trabajo no lo es todo en la vida. Sino, bien sabes tu, que yo me habria tirado por un puente.
    Y piensa un poco en tus compañeros y amigos que leeran este post y pensaran que para que esforzarse contigo si hagan lo que hagan parece que a ti te encanta estar metido hasta las orejas en esta mierda de vida que te has inventado y que te empeñas en alimentar.
    Tienes cosas que mucha gente no ha tenido nunca, tienes grandes amigos, tienes familia, una carrera, un coche, tu play, estas sano, eres libre de accion y pensamiento...... y no eres capaz de disfrutar de ninguna de ellas. Y eso si que es triste y una ofensa para todo el que te rodea.
    Creo que con 30 tacos que tienes deberias dejar de lloriquear por las esquinas y solucionar tu vida. Si no te gusta donde estas vete, no creo que tengas problemas para encontrar otro curro. Y si el sitio donde estas tiene algo de bueno, lucha porque mejore, enfrentate a quien te tengas que enfrentar que no eres un niñato becario sin esperiencia, y propon cambios y mejoras.
    La felicidad hay que trabajarla y solo nosotros podemos controlarla.
    Tu piensas que yo soy feliz no? Pero si yo me pusiera en tu misma actitud seguro que tambien pareceria infeliz, triste y hundida. O te tengo que recordar mi situacion laboral......
    Sin mas, decirte que aqui estoy para ayudarte en la busqueda de la felicidad que tienes tan cerca y no ves. un besot

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